Esta noche he tenido una pesadilla horrible. ¡He soñado que estaba en una fiesta de Silvio Berlusconi! Bueno, dicho así, suena de puta madre. Y lo es. El caso es que era una fiesta cojonuda con el paquete básico de una Silvio Party: música, alcohol y drogas. Y ahí estaba yo, desentonando en la fiesta con mi camiseta de Iron Maiden —qué feas son las jodías— y pensando que hay algo que no va bien cuando se me acerca Silvio. Que si qué tal, que si me lo estoy pasando bien, que si cómo salgo de la crisis, que si qué tal la droga, que muy buena le digo y que qué tal las tías. ¿Las tías? ¡Claro, eso es lo que no cuadra! ¿Dónde están las tías, Silvio? Sonriendo da una palmada y empiezan a entrar tías a puñados. Como no veo un pescado de lejos me deleito con los contornos, pero a medida que se van acercando se agudiza mi vista y distingo el horror: todas las tías tienen la cara —y la nariz— de Belén Esteban. ¡Noooooooooooo! Me tienen rodeado, son como zombis y cuando están a punto de tocarme me despierto entre sudores fríos y con el pulso acelerado. Ha sido horrible.
Minutos más tarde y algo ya más tranquilo me he dicho a mí mismo: «Tío, no vas a dejar que una pesadilla te joda el día, ¿no?» Pues claro que no. Y me he bajado a desayunar lo que más me gusta desayunar: unos Soylent Green con leche. Y mientras se reblandecían un poco –que me gusta que se ponga la leche verde– estaba viendo un interesantísimo programa en la MTV sobre cómo un tal Kurt Cobain vendía millones de discos esforzándose por no venderlos, y de pronto, interrumpen la programación habitual para dar una noticia de última hora y nos dejan sin saber si Kurt se recuperó o no del cóctel de champán y flunitrazepan en Roma y de si eso formaba parte de la estrategia de ventas.
La chica del telediario está visiblemente afectada y no creo que sea por Kurt; tal vez por Courtney. Tiene pinta de que va a dar una noticia de alcance. Grita histérica: «SOYLENT GREEN SON GENTE».
¡No me jodas! Mis Soylent resbalan de mi boca abierta al tazón. Hostia puta, ¿me habéis cortado lo de Kurt y Courtney sólo porque los putos Soylent Green son gente? Pero ¿a quién coño le importa de qué estén hechos si saben bien? Sí, es cierto que a veces te encuentras un diente o una uña del pie, pero el sabor compensa con creces esas chorradas.
Me termino mis Soylent con regocijo. Saber que los fabrican con viejos y mendigos resulta menos desagradable de lo que cabría esperar.
Bueno, el día no ha empezado bien, he tenido una horrible pesadilla y el único programa bueno de la historia de la MTV ha sido cancelado, pero todo puede mejorar. Me voy a internet y busco la peor película de la historia. ¿Por qué la peor? Porque así no me creo expectativas y por mala que sea no me sentiré decepcionado. Así, cuando diga: «Eh, pues no era tan mala», mi día habrá mejorado, pero si finalmente tengo que decir: «Mierda, sí que es la peor peli de la historia», me quedaré como estoy. Cómo no, Google ofrece 1.450.000 resultados. Me parecen pocas, la verdad. Especifico que no quiero Plan 9 de Ed Wood, que esa ya la he visto y no es la peor. 6.900.000 resultados. ¿Seguro que esto funciona? Es igual, ya he visto un título que me ha llamado la atención: Manos, the hands of fate. Francamente, no se me ocurre un título más redundante.
Voy a mi filmoteca, sección De lo malo lo peor y… ¡Hostia, un VHS! ¡Esto qué es! Averiguo qué es eso del VHS y cuatro horas después encuentro un vídeo entre toda la mierda del garaje y lo que es más importante: un euroconector. Meto la cinta. Está al final. ¡Me cago en Monesvol! Rebobino.
Por fin empieza.
…
…
…
Por fin acaba.
Dios, qué suplicio. Una cosa está clara, ninguna cosa que yo os diga podrá haceros imaginar ni de lejos la remierda ante la que estamos. Hay que verla para entenderlo.
En primer lugar, os pongo en antecedentes. Hal Warren, vendedor de abonos —pero no abonos de fútbol, sino mierda de la buena, lo que explica muchas cosas—, hablando con el guionista Stirling Silliphant en un bar afirma que él puede rodar una película de horror con muy poco presupuesto, que eso está tirado. Silliphant, en un arranque de insensatez, respondió con la frase que más daño ha hecho a la Humanidad en toda su historia: «¡A que no hay güevos!» Y por desgracia, los hubo.
Os voy a contar todo el reparto de la peli, que vais a flipar. Familia protagonista: Hal Warren y señora, más su hija insoportable y un perro-patada que afortunadamente muere. Estos van de vacaciones en un coche descapotable y el director nos deleita durante unos insoportables minutos con unos planos de un paisaje horrible, que por lo visto es El paso, pero que si me dicen que está rodada en el mismísimo Infierno me lo creo.
Los panolis estos se pierden por unos extraños caminos y llegan a Mataporculo, eso sí, antes se cruzan con una pareja cuya única labor en la película es estar dándose el filete para que la poli aparezca y los mande seguir haciendo eso pero en otro sitio. Estos dos protagonizan la primera escena descoyuntante de la película. Se supone que mientras se estaban enrollando en el coche pasa la familia Panoli y ellos debían mirar hacía allí y decir que por ahí no hay nada. Pero estaban tan concentrados dándose el lote que ni se enteran de que ha pasado el coche hasta que alguien les debe decir: «Gilipollas, que ya han pasado». Y entonces la chica mira a la cámara, pone cara de ¿en serio han pasado?, se gira y suelta la frase como media hora tarde para deleite de los fans, que ya intuimos que esto no es horror sino comedia.
The Panoli Family llega a una casa en mitad del desierto donde vive Torgo, un notas que tiene el baile de San Vito y unas rodillas como cojones de elefante. El tío informa que de ahí no hay salida, suena la «Sintonía Torgo» que durante un rato sonará siempre que Torgo aparezca en pantalla, mantiene un duelo de miradas con Warren que dura la hostia o más (esto es despollante porque no se sabe si es un duelo de miradas o es que no saben qué viene a continuación) y suelta unas cinco veces su frase favorita: «El amo no lo aprobará». Y el amo es el otro personaje de la película junto con sus seis esposas. Yo pensaba que ese tío era Manos, pero no, es un tío que adora a Manos, una especie de… bueno, ya sabéis, un… uno de estos que… una puta mierda, vaya. Un malo de chichinabo. Eso sí, lo único que me ha gustado de la película es el traje de El Amo, con unas manos dibujadas que el tío aprovecha para enseñarnos siempre que puede. ¡Dios, qué redundante está quedando esto! Necesito que alguien me eche una mano. ¡ARGGH!
Otro momento delirante tiene lugar cuando Manos dice que Torgo debe ser eliminado y sus esposas pretenden matarlo, ojo a esto, poniéndole las manos en la cara. Sí, sí, así de heavy es la peli. Después de un buen rato haciendo el gilipollas, parece que se dan cuenta de que matarlo, no lo están matando demasiado. Entonces El Amo con cara de tengo que hacerlo yo todo, hostias, realiza el gran efecto especial de la película: le arranca la mano a Torgo con una explosión y se queda con la mano ardiendo mientras Torgo huye con el muñón en llamas. Mentiría si dijera que no me gustó esta escena pero ni de coña compensa el horror restante.
Afortunadamente la película termina con un giro de guión brutal. Es ironía. Y después de todo, el tal Hal Warren, que es un cachondo, tiene tiempo incluso para amenazarnos con un The end?
Creo que la película fue proyectada una sola vez. En serio, solo una. Los actores participaron gratis a cambio de un porcentaje en los beneficios, y entre todos los porcentajes sumaban un 300%. 300% de cero, cero. Este Hal… a ver si no iba a ser tan tonto. Encima el tío usó una cámara que sólo grababa 32 segundos y sin sonido así que el montaje es delirante y todas las voces están grabadas en estudio por 3 personas. Dicen que la niña al escuchar cómo sonaba su voz se puso a llorar. Yo también lloro cada vez que habla.
Por lo visto una de las poquísimas copias en 35mm que existen la tiene Quentin Tarantino quien asegura que es su comedia favorita de todos los tiempos. Creo que, efectivamente, con la cantidad adecuada de alcohol y drogas puede llegar a serlo.
Veredicto final: No es la peor película de la historia porque me he reído de lo lindo, pero si me encuentro a Hal Warren algún día por la calle, le calzo dos hostias al estilo Bud Spencer, con la mano abierta.
Holy Shit, qué buen relato de terror nostálgico. Me estaba dando la sensación de que lo tenías apuntado en tu querido diario, (con portada fotocopiada del nevermind y escrito con las lagrimas de sangre del 5 de abril del 94)lo habías descubierto tropecientos años después y estabas recopiandolo todo. Muy bueno, de verdad. Toma nota de deleitarnos con tus sueños. Pero de verdad se puede soñar con Berlusconi y sus putas?? Yo sueño que mis amigos heteros guapos son mis novios, pero luego van y me dejan por otro :( Una vez, que mataba a un tio y lo metía en una maleta. Luego me desperté bruscamente pero estaba convencido de que no había sido un sueño y que lo había matado, pero que no me acordaba dónde lo había metido. :(
ResponderEliminarJoder pues de tan mala que parece me ha entrado curiosidad. A ver si la consigo, cosa que, supongo, será complicado. Parece un total disparate y cutre a más no poder.
ResponderEliminarGracias por tenernos al corriente de este tipo de pelis que no las conoce nadie (salvo tíos raros como Tarantino ;-) y que de vez en cuando es bueno visionar.
Buena entrada, Einer. Un saludo.
¿visionar? ¿Existe esa palabra? Es que ahora que vuelvo a leer el comentario me suena muy raro. Mejor ver...
ResponderEliminarEl veredicto final (con permiso del Sr. Lumet) es la repera, jaja. Todo apunta que no sirve ni para hacerle doblete a los "killer klowns"... ¿Sirve para verla entre amigos a altas horas y chotearse a su costa al menos?. Saludos guzzeros.
ResponderEliminaryosónico, me alegra que te haya gustado. Si te digo la verdad nunca recuerdo lo que he soñado pero seguro, segurísimo, que no sueño con Berlusconi. Con putas no lo descarto.
ResponderEliminarBuenísimo lo del sueño de la maleta y el tío dentro. Y no saber si era un sueño o no es la repera.
Eres un psicokiller en potencia, darling.
Javi, que va, nada difícil de conseguir. La tienes en internet y editada en DVD. Es un truñaco, eso tenlo claro si decides visionarla. ;D
Un saludo.
Guzz, a mí Killer Klowns from outer space me gusta bastante y te advierto que se está trabajando en una secuela.
Manos para lo único que sirve es precisamente para eso, para chotearse con los colegas, porque como la veas en plan serio acabas en la UVI.
Un saludo.
Pues será mala esta película (¿es meritoria de calificarse como tal?)pero me he reído un montón leyendo tu entrada. Un saludo.
ResponderEliminarMarcos, me alegro que te hayas divertido. Sí, podemos calificarla de película. Les salió mala pero hay que reconocer que el argumento está al nivel de la mayoría de las pelis del género. Para echarse unas risas, vale.
ResponderEliminarUn saludo.
Dios mío, qué pesadilla, me ha recordado a aquel relato mio de "La materia de los sueños". Espero que si alguna vez me invitan a un Bunga-Bunga (lo dudo bastante) no me encuentre clones de ls Esteban. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarmiquel, nunca se sabe cuándo y cómo puede acabar uno en un Bunga-Bunga. El relato que comentas lo leí, que además es reciente, aunque no comenté y buenísimo como siempre.
ResponderEliminarUn saludo, miquel.