Tarántula (1955) Tít. orig.: Tarantula Dir.: Jack Arnold Gui.: Robert M. Fresco, Martin Berkeley Int.: John Agar, Mara Corday, Leo G. Carroll, Nestor Paiva, Ross Elliott Dur.: 77 min.
Hoy voy a comentar Tarántula, una película que me gusta mucho y que fue creada a rebufo del éxito de la gran Them! (La humanidad en peligro, 1954), de la que podéis leer una estupenda reseña en el blog de Roy D. Mustang y que originó toda una moda de películas de bichos gigantes.
A raíz de la Segunda Guerra Mundial y de la invención de la bomba atómica, el tema de la energía nuclear y sus efectos pasó a ocupar un lugar privilegiado dentro de la ciencia ficción de la época. Así, fuimos testigos del nacimiento de criaturas como Godzilla o las hormigas gigantes de la comentada Them! Sin embargo, hay un detalle que me gusta mucho de Tarántula, y es que a diferencia de estas y otras copias más que surgieron en los años siguientes, el origen de todo el desastre no es una experimentación atómica (aunque se haga referencia a un isótopo radioactivo), sino las fatales consecuencias de un experimento puramente bienintencionado: la creación de un nutriente que permita un desarrollo mayor y más rápido de animales y vegetales ante la previsible superpoblación mundial. Sí, vale, un experimento «bienintencionado» llevado a cabo por un mad doctor y sus secueces, pero sus intenciones eran buenas. ¿Quién no ha querido comer araña gigante alguna vez?
Tarántula fue creada por el gran Jack Arnold basada en una historia propia y de Robert M. Fresco y, a pesar de contar con un presupuesto muy bajo (o quizás gracias a ello), se las apañó para crear una buena historia de suspense e investigaciones de manera que durante buena parte del metraje fuera el espectador el que tuviera que imaginarse al monstruo, ya que la tarántula, no aparece por ningún lado. Así nos encontraremos con doctores deformes (el Dr. Deemer es lo mejor de la película) y con los restos de destrucción que deja el arácnido gigante a su paso y que nos harán imaginar un monstruo que cuando por fin aparece, cumple con las expectativas creadas.
Arnold crea el efecto de tarántula gigante con bastante inteligencia al rodar a una araña por separado y después juntar los planos con trucos fotográficos, otorgándole un realismo a la criatura del que algunas creaciones coetáneas como la propia Them! (1954) o las posteriores Monster from Green Hell (1958), Mantis (The deadly Mantis, 1957) o El pantano diabólico (Attack of the giant leeches, 1959) carecen, vistas hoy en día.
Algunos detalles de la película la hacen muy graciosa aunque le resten grandeza a la cinta y la alejen de otras joyas del género que atesora Arnold como La mujer y el monstruo (Creature from the black lagoon, 1954). Me estoy refiriendo al hecho de que la tarántula aparezca siempre de detrás de alguna colina para que nadie la vea de lejos o que la gente que huye del monstruo siempre se tropiece (hasta tres veces se llega a caer el granjero que además necesita varias horas para levantarse), lo que hace que uno acabe deseando que el arácnido devore a todos los inútiles del pueblo.
De hecho, las actuaciones no son tampoco nada destacable en general, exceptuando a Leo G. Carroll como el profesor Gerald Deemer, que es el único que está realmente a la altura, y quizás la guapa Mara Corday, que lamentablemente tiene un papel testimonial.
En los últimos 20 minutos llegará la acción pura y dura en los varios intentos infructuosos de acabar con la criatura. Afortunadamente, aparecerá Clint Eastwood para destruir al bichejo a golpe de napalm. ¡Te queremos, Clint!
Supongo que esta película sirvió de inspiración al propio Arnold en su posterior, y esta sí, obra maestra, El increíble hombre menguante (The incredible shrinking man, 1957), en la que un diminuto Scott Carey tenía que luchar, con un alfiler a modo de espada, contra una araña.
Aunque Tarántula no esté a la altura de las grandes obras de Arnold es, sin duda, una película interesantísima y la única de la moda que instauró Them! que se acerca minimamente a aquella en calidad.
Precisamente recomendé esta peli en el blog de Roy D. Mustang cuando comentó Them! (¿Por qué ya no estrenan pelis con signos de exclamación? Creo que quedan muy! bien!). Siempre me hizo gracia esta peli. Se incluye en una serie de packs de buena calidad de imagen (los sacó la Warner creó) con otros clásicos de la época, ideal para ver de una sentada. La comenté hace tiempo en mi blog, de estas tengo un montón.
ResponderEliminar¡Qué casualidad! ¡Justo ahora me hallaba redactando un artículo sobre este film! (El cual, espero, publicaré mañana).
ResponderEliminarJack Arnold es uno de los mejores directores de cine fantástico que han existido, sus películas son realmente entretenidas incluso para quien no está acostumbrado a films de sci-fi tan antiguos.
Me encanta que cuando se hable de esta película se mencione la aparición de Clint, y eso que sale de esta guisa jeje.
Es uno de las primeras películas que vi del género fantástico y me dejó un recuerdo imborrable. El doctor deforme por la acromegalis es Fess Parker, actor que haría de Daniel Boon en una serie televisiva de gran éxito cuando era crío. Por cierto que entre los actores que combaten a la Tarantula en las escenas finales hay un jovencísimo Clint Eastwood, creo que hacía de piloto de un jet. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarRaül, vi tu comentario y me pasé a leer tu reseña. Qué puedo decir, parece que todos coincidimos en los buena que es esta peli.
ResponderEliminarYo tengo la película en un pack que venían 7 películas de ciencia ficción de los 50, 5 de las cuales eran de Arnold, pero no sé si será el mismo que comentas.
Un saludo.
Roy, ahora me paso a ver lo que has puesto que veo que ya lo has publicado.
Coincido completamente con lo que comentas de Arnold, especialmente por lo que hizo en los 50.
Lo de Eastwood tiene guasa, qué tenga que venir él a matar al bicho porque nadie puede...
Un saludo.
miquel, no me consta lo de Fess Parker, quizás participó sin acreditar. Donde sí estuvo seguro es en Them!
Efectivamente es Clint Eastwood, de hecho el último fotograma que pongo es el suyo pilotando el avión.
Un saludo.
Tiene buena pinta, y sale Clint Eastwood. El increíble hombre menguante me gustó mucho, o sea que ésta no creo que me defraude.
ResponderEliminarUn saludo, Einer.
PD: por cierto completaré tu entrada con la de Roy.
Javi, esta, siendo muy interesante, no está al nivel de El increible hombre menguante. Aun así es una película muy recomendable.
ResponderEliminarUn saludo.
Bueno, es que El increíble hombre menguante es todo un referente del género, como lo es a mi modo de ver La mosca, El hombre invisible o aquella cuyo título no me acuerdo (quería conseguirla) de una mujer, un barco, un lago y un ser medio hombre medio reptil que creo que le gusta y se las hace pasar putas. Esa también me gusto en su momento y la recuerdo.
ResponderEliminarUn abrazo, Einer.
La del hombre pez me refiero a la clásica en blanco y negro de los 40 - 50 (50 más bien creo que es)
ResponderEliminarCreo que te refieres a La mujer y el monstruo, o sea, la criatura del lago, también de Arnold. Esta. Si es esa, para mi gusto es la mejor de Arnold junto con El increíble hombre menguante.
ResponderEliminarUn saludo, Javi.