El jorobado de Notre Dame (1923) Tít. orig.: The hunchback of Notre Dame Dir.: Wallace Worsley Gui.: Perley Poore Sheehan (Novela de Victor Hugo) Int.: Lon Chaney, Patsy Rith Miller, Norman Kerry Dur.: 93 min.
A pesar de lo que muchos creen, ésta no es la primera adaptación de la obra de Victor Hugo titulada Nuestra señora de París, sino la tercera (por lo menos) existiendo una versión de 1905 titulada Esmeralda y otra de 1911 titulada Nuestra Señora de París.
La película es bastante fiel a la historia escrita por Victor Hugo en 1831 y cuenta la historia de Quasimodo, un hombre deforme, sordo y medio ciego que se ocupa de las campanas de la catedral de París, Notre Dame. El capitán Phoebus de Chateaupers se enamora de una muchacha zíngara llamada Esmeralda, pero Johan, el hermano del archidiácono también desea a Esmeralda y ordena a Quasimodo, con malas artes, que secuestre a la zíngara. El capitán Phoebus llega a tiempo de detener a Quasimodo y el jorobado es condenado a ser azotado públicamente. Entre Phoebus y Esmeralda nace un amor verdadero pero Clopin, padre adoptivo de la muchacha, se opone a la relación. Johan, apuñala por la espalda a Phoebus por envidia y le deja malherido, siendo Esmeralda acusada del crimen y condenada a morir en la horca. Cuando es llevaba al patíbulo, Quasimodo la ve desde lo alto de Notre Dame y la rescata acogiéndose a sagrado en la catedral. Por su parte, Clopin, el rey de los mendigos, inicia un levantamiento en la ciudad para liberar a Esmeralda, sin saber que Phoebus se dispone a hacer lo mismo. Quasimodo defenderá a Esmeralda desde lo alto de Notre Dame arrojando piedras y plomo hirviendo. Finalmente, la catedral será tomada y Quasimodo acabará su vida apuñalado por Johan pero arrojándolo al vacío en su último acopio de fuerzas.
La película cuenta con la dirección de Wallace Worsley que es bastante floja. Se nota que no tiene el talento de gente con Griffith, Stroheim o Chaplin y hace que en algunos momentos la película pierda ritmo e interés por el abuso de largos intertítulos, ya que no es capaz de expresar lo que quiere con imágenes. Lo que verdaderamente destaca de esta película son sus buenos decorados de las calles de París y, sobre todo, de la catedral de París y, por supuesto, la interpretación de Lon Chaney en el papel de Quasimodo.
Lon Chaney era bastante conocido por aquel entonces por su participación en la película El milagro (The miracle man, George Loane Tucker, 1919) y tras su interpretación en ésta, adquiriría categoría de estrella en Hollywood, de forma absolutamente merecida. Para la recreación del papel del jorobado, Chaney, maestro del maquillaje, utilizó una dentadura postiza que simulaba unos dientes prominentes, pómulos falsos creados con narices postizas, cejas y peluca postizas y un ojo de cristal (que le provocó graves pérdidas de visión) y que le otorgaban un aspecto tal, que algunas personas creían que el papel estaba interpretado por una persona deforme de verdad. Para darle mayor naturalidad a su personaje, Chaney portaba una joroba falsa de entre 5 y 7 kilos que le ayudaba a andar encorvado con la sensación de realismo que pretendía. Para preparar el personaje, Chaney se entrevistó con personas deformes de verdad con el objetivo de lograr la mejor caracterización posible, lo cual demuestra que, a pesar de que fuera un doble el que descendiera por la fachada de la catedral en ciertas escenas, la implicación de Chaney con sus personajes era máxima.
La mayoría de los muchísimos extras que figuran en la película fueron contratados en las zonas más pobres de Los Angeles, pagándoles un dólar por noche más las comidas. Muchos de estos extras eran prostitutas que se sacaron un sobresueldo haciendo otros trabajos en el estudio de Universal aparte de actuar. También se dice que se contrataron 50 detectives de la agencia Pinkerton que fueron colocados entre la multitud para encontrar carteristas.
Una película que también recibió en España el titulo de El jorobado de Nuestra Señora de París y que, aunque sólo sea por la interpretación de Lon Chaney, merece la pena verla.
Bravo por Chaney pero una pena que el director no estuviera a la altura. Aún con todo me encantó el ambiente en el que se envuelve toda la historia. Desconocía las dos anteriores versiones que mencionas. Un abrazo.
ResponderEliminarTampoco es que esté demasiado mal el director, pero esto podía haber sido un peliculón si la hubiera dirigido, por ejemplo, Borzage que era el director que propuso Chaney (verdadero artífice del proyecto). Yo tampoco he visto las dos versiones anteriores, pero tengo interés. Un abrazo, Marcos.
ResponderEliminarDices, Einer, que la película es "bastante fiel" a la historia original, y me veo en la obligación de levantar la mano y contradecir esa afirmación: no, la película traiciona el espíritu de la novela de Víctor Hugo al quitar a Claude Frollo el papel de antagonista y entregar toda la "carga moral" a su hermano Jehan. ¡Es Claude Frollo y no Jehan quien arde de pasión por Esmeralda, es Claude quien desata toda la desgracia y provoca la trágica muerte de la gitana! Creo que esta alteración tiene motivos de índole política: es 1923 y seguramente no se quiere presentar a un fraile malvado! No sé. Sea como sea, esta alteración me entristeció, aunque reconozco que la escena de Esmeralda dando agua a Quasimodo está muy bien lograda.
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