Tucker y Dale contra el mal es una película canadiense que ha pasado tremendamente desapercibida en nuestro país —y en general, en todas partes— ya que la distribuidora fue retrasando paulatinamente el estreno hasta que acabó yendo directa a DVD. Esto ha hecho que sea menos conocida de lo que debería, pero os aseguro que es tan sangrienta como hilarante.
Unos adolescentes (veinteañeros, claro), van un fin de semana de acampada a un bosque dejado de la mano de Dios, donde van a fumar porros, beber cerveza, bañarse desnudos, folletear si Dios quiere, y tal vez acabar empalados por unos paletos locales, Dios no lo quiera. Obviamente, camino de ese bosque alejado de todo rastro de civilización, habrán de parar a repostar y estirar las piernas por última vez en la gasolinera más terrorífica de todo Estados Unidos. Y allí, entre escupideras, conejos desollados, sierras oxidadas y huevos en salmuera se cruzarán por primera vez con Tucker y Dale, dos paletos locales que a ojos de estos adolescentes tienen que ser asesinos en serie sin lugar a dudas. Y a partir de aquí, una serie de malentendidos, como si de una comedia de enredos se tratara, hará que las muertes se sucedan para regocijo nuestro.
¡Eh, Dale, por qué no le enseñas a la rubia la guadaña! |
Quizás lo que más me gusta de Tucker y Dale, debut como director de Eli Craig, es que los papeles del slasher están invertidos y las teóricas víctimas acaban siendo los asesinos. Más o menos. Los chavales están tan asustados que tratarán de dar caza a Tucker y Dale, antes de que Tucker y Dale los cacen a ellos, lo que acabará provocando una batalla en mitad del bosque donde nada es lo que parece.
Vaya día, Sheriff; no se va a creer lo que ha pasado. |
Los tópicos del slasher y los guiños a las pelis favoritas de todo amante del género son continuos y perfectamente reconocibles y la increíble química entre Alan Tudyk (Tucker) y Tyler Labine (Dale), así como los divertidos diálogos, hacen que los 85 minutos que dura la película se pasen en un suspiro carcajada tras carcajada y muerto tras muerto. Porque esto es una comedia, pero no hay que olvidar que también es un slasher, y aquí muere hasta el apuntador y todos de manera divertidísima.
Otro motivo para ver la peli: Katrina Bowden. |
Es posible que alguien que no haya visto la película ahora esté pensando en algo similar a las sagas tipo Scary Movie, pero nada que ver, esto es una comedia con varios guiños al género, pero en absoluto una parodia.
Además, una cosa que juega muy a favor de Tucker y Dale, es que tanto ellos dos como los adolescentes están convencidos de estar viviendo una situación totalmente terrorífica.
Lo único que me decepcionó (ligeramente) es la parte final, que no voy a desvelar, por supuesto, pero que creo que rompe un poco con el tono general del film.
Aun con todo, me atrevo a decir que Tucker & Dale contra el mal es una de las películas más divertidas de los últimos años. Por cierto, si no la habéis visto todavía, no veáis el tráiler, porque revela muchos de los momentos más significativos de la película.
Cuando oí hablar por primera vez de la peli en una página de cine de terror (creo que Bloody Disgusting), me entraron ganas de verla. Sin embargo, mi brújula/instinto me ha alejado de ella varias veces, razón por la que no la he visto y no sé si lo haré. Veré que me dice la tripa si llega otra mención sobre ella.
ResponderEliminarPor cierto, hace un par de semanas vi todas las de Superman seguidas (de las 2 primeras el montaje del director y la versión Richard Donner) y he de decir que la 3 y la 4 superan Superman Returns en el sentido de que son más "revisibles".
Pues yo creo que te gustaría. Yo la encuentro muy divertida tanto en las situaciones que se dan como en los diálogos.
EliminarLa III y la IV son divertidísimas y se pueden revisar cada cierto tiempo, en cambio la de Synger es un poco anodina. Una vez vista ya no tiene mucho sentido volver a verla. Leí el comentario que hiciste sobre lo bizarro que resulta que Annette O'Toole sea el rollete de Superman en la III y luego su madre en Smallville y me reí porque a mí también se me hizo raro. No te comenté nada porque en enero tengo poco tiempo pero supuse que habías hecho uno de tus maratones.
Un saludo.
Pues efestiviwonder.
EliminarDivertidísma, lo mejor, es como tú dices, que todos creen estar en una historia terrorífica, sin saber que están en una comedia. No decepciona ni a los amantes del gore ni del humor negro. Muy recomendable.
ResponderEliminarSaludos.
Exacto, lo que la hace más graciosa es que nadie actúa como si estuviera en una comedia. Y de gore y de humor negro anda sobrada. Gran peli.
EliminarUn saludo.
Gracias. Me pasaré por tu blog. Un saludo.
ResponderEliminarPues sí que ha pasado de puntillas porque yo no sabía nada de ella y eso que estoy al tanto de los estrenos. La tienen en mi video club (soy de esos raros especímenes que aún van al videoclús) y la pillaré pues esa Katrina me ha convencido. Saludos. Borgo.
ResponderEliminarEn mi barrio quedaba un videoclub y lo han cerrado hace poco. Katrina Bowden también enseña cacho en la serie 30 Rock que también es muy divertida. Ya me contarás que te pareció Tucker & Dale.
EliminarUn saludo.