Ichi the killer (2001)

Ichi the killer (2001) Tít. orig.: Koroshiya 1 Dir.: Takashi Miike Gui.: Sakichi Satô (Comic: Hideo Yamamoto) Int.: Tadanobu Asano, Nao Omori, Shinya Tsukamoto, Paulyn Sun, Susumu Terajima. Dur.: 123 min.

Esta película la comento dentro del homenaje a Shinya Tsukamoto porque su carrera se ha desarrollado en gran parte no sólo como director sino también como actor. La película es un adaptación del comic manga Koroshiya Ichi de Hideo Yamamoto y está dirigida por Takashi Miike, admirador de Tsukamoto, quien tiene un papel bastante curioso.

Ichi the killer es una película gore, y esto es un aviso para los que no la hayáis visto todavía, porque es una peli que no recomendaría a todo el mundo. Si no os gusta el gore o si sois de estómago sensible, pues es muy posible que esta película os resulte desagradable.

Los que ya la hayáis visto recordaréis cómo comienza. Un tipo esta pegándole una paliza a una chica y en la terraza está Ichi, viendo la movida y masturbándose. Al final eyacula en una planta que gotea en el suelo y sobre el semen se forma el título original de la película en relieve. Os preguntaréis cómo hicieron este pedazo de efecto especial, pues está claro que por ordenador. ¿Pero cómo hicieron el semen? Pues muy fácil, Takashi Miike le dio un cubo a Tsukamoto y le dijo: "Llénalo". Éste se puso a ello, pero no conseguía todo lo que necesitaban para la escena, así que el cubo pasó por tres personas más. Si es que al final, lo tradicional es lo más sencillo.

La película está protagonizada por Tadanobu Asano, que interpreta a Kakihara, un sádico y sadomasoquista miembro de la yakuza, que está investigando la desaparición de su jefe junto con 300 millones de yenes. Por supuesto, Kakihara no usa el método deductivo en sus investigaciones, es más de pasar a la acción. Tras algunas torturas y mutilaciones, Kakihara y sus hombres llegan hasta Ichi, un esquizofrénico que cuando pierde los nervios se dedica a hacer carne picada. Junto a Ichi están algunos miembros de la banda que fueron repudiados, entre los que destaca Jijii (Tsukamoto) que es quien controla a Ichi.

La pelicula es bastante violenta, con un ritmo trepidantemente lento (ya no sé ni lo que escribo), y, si te gusta el gore, seguro que te resulta divertida. Y digo si te gusta el gore, porque si no, es posible que no entiendas que le vemos de gracioso Miike o yo mismo a un festival de visceras y sangre. Comprendo que haya gente que al verla piense que la peli es aberrante, ridícula, absurda, que Ichi es un llorón gilipollas, que no tiene sentido ninguno que mate como mata, que la actitud de Kakihara es irracional. Pues claro que es todo eso, y eso es lo que la hace magnífica. Ichi es un llorón esquizofrénico y pajillero controlado por un cabrón que lo maneja con argumentos de guardería: "¿Ichi, ese no te dio una colleja en el colegio? Pues va a haber que matarlo" En contraposición a Ichi está Kakihara, el típico HIJO DE PUTA. Ese pedazo de cabrón, asesino sin escrúpulos, torturador profesional que disfruta con lo que hace y que lo convierte en un arte, sádico, masoca, con cara de "me han puteado cosa mala y me mola cantidubi", ese cabrón que si está de tu parte respiras tranquilo pero sospechando que en cualquier momento se vuelve loco y te jode vivo, y si está en tu contra no tienes sospechas, sabes que te va a joder vivo.

Ichi the killer es uno de mis gores favoritos, con escenas potentísimas como la tortura de Suzuki y otras casi ridículas, pero geniales como lo de cortarse la lengua y responder al teléfono como si nada. Frases cachondísimas como esa de Ichi en la que tras matar al tío que maltrataba a la protituta dice: "No te preocupes, ahora te pegaré yo" o esa otra en la que Kakihara dice: "Hay algo inhumano en esta carnicería. La mayoría de la gente tiene una parte sádica o masoquista, pero Ichi es 100% un sádico. Tengo ganas de encontrarme con él". Suena parecida a esa otra que dice: "No sé si te habrás dado cuenta, incluso ahora, de que no hay nada sádico en mis actos. [...] No, Peque, en este momento soy de lo más... masoquista". ¿Será otro homenaje de Quentin?

Con Ichi the killer te ríes, te entretienes, te cabreas, te aburres, te indignas, te excitas,... Esta peli de Miike no te dejará indiferente y esa es su mayor virtud.

Por comentar alguna cosa del papel de Tsukamoto pues que es muy interesante. Al principio parece un tipo bastante tonto al servicio de la yakuza, después descubres que el tipo es un manipulador de cuidado y que va a enfrentarse a toda una banda y, finalmente, en una escena muy cachonda, vemos que el tío es culturista y está cuadrado. Un papel bien interpretado por Tsukamoto, que se defiende de manera correcta delante de la cámara, casi tanto como detrás. Bien cuando se hace el tonto, bien cuando va de jefe, genial cuando se cabrea y nada sobreactuado, defecto típico de los japoneses.

El final de la película es lo único que me resultó un poco decepcionante. Si uno lo analiza un poco, tiene bastante sentido, pero creo que hubiera estado mejor si se hubiera resuelto de otra forma. En fin, un film magnífico, gore y que no recomiendo a todo el mundo.